Buscame, yo te encuentro…
Ya se, no descubrí nada nuevo. Buscar gente del pasado es un pasatiempos al que creo prácticamente nadie puede escapar. Compañeros, amigos de la lejana infancia, novios y conocidos. ¿Que habrá sido de la vida de tal? ¿Qué estará haciendo? Busqué a algunos y otros me buscaron. Es el vicio de internet, y la facilidad de encontrar a tanta gente no deja de sorprenderme además de conocer detalles de sus vidas y obras, sus cambios radicales o la persistencia en el mismo camino en que supe conocerlos. Entonces me pregunto si esto es bueno o malo, si realmente hay necesidad de saber que fue de la vida de… y de entrar en contacto nuevamente con aquellos con quienes por alguna razón dejamos de vernos. Por si fuera poco, no sólo entrar en contacto sino vivir minuto a minuto su vida diaria, sus actualizaciones de frases, blogs, nacimientos, despedidas, vacaciones, noviazgos, triunfos, fracasos… Antes –y cuando digo antes no me refiero a tantos años, sino a unos diez como mucho- era